SÍ! La vacunación induce una respuesta inmune más consistente y fuerte incluso en las personas previamente infectadas.
👉🏽 EN RESUMEN: Es importante vacunarse incluso si se ha recuperado del COVID-19. La vacunación aumenta su respuesta inmune al COVID-19, brindándole protección adicional incluso para nuevas variantes.
❓ ¿Qué sabemos sobre la inmunidad después de la infección por COVID-19?
En los primeros días de la pandemia, no teníamos mucha información sobre si la inmunidad después de la recuperación del COVID-19 duraría. Estas preocupaciones se basaron en lo que sabíamos sobre otros coronavirus, como los que causan el resfriado común. Los coronavirus del resfriado común no inducen respuestas inmunitarias muy fuertes, por lo que podemos contraer resfriados todos los años, ¡y a veces varias veces en un solo año!
Los investigadores han estado estudiando la respuesta inmune al SARS-CoV-2 en personas que se han recuperado del COVID-19. La mayoría de las personas presentan una respuesta inmunitaria a la infección por SARS-CoV-2. Las personas que estaban lo suficientemente enfermas como para ser hospitalizadas suelen tener niveles altos de anticuerpos.
Sin embargo, las personas que tuvieron una enfermedad leve pueden no tener una respuesta inmune tan fuerte y las personas inmunodeprimidas pueden tener una respuesta inmune aún más débil. También sabemos que, HASTA AHORA, la respuesta inmune persiste al menos 7-8 meses después de la recuperación en algunas personas y ofrece cierta protección contra la reinfección.
❓Si ese es el caso, entonces, ¿por qué debería vacunarme si anteriormente tuve COVID-19?
➡️ La protección inmunológica después de la infección por COVID-19 dura algún tiempo; no se sabe exactamente cuánto tiempo. Y la duración puede ser diferente para diferentes personas.
➡️ La vacuna COVID-19 estimula la respuesta inmune que se desarrolló después de la infección. Este impulso conduce a una inmunidad más fuerte que podría durar más. Además, la respuesta inmune después de la recuperación de COVID-19 es variable, mientras que la respuesta a la vacunación es constante.
➡️ Aunque es raro, es posible volver a infectarse con el SARS-CoV-2 después de haberse recuperado del COVID-19. La sólida respuesta inmunitaria inducida por la vacunación proporciona una protección adicional contra la reinfección.
➡️ Los estudios han demostrado que la respuesta de los anticuerpos después de la vacunación es MUCHO más alta que la respuesta de los anticuerpos después de la infección por COVID-19. Esta respuesta más fuerte ofrece cierta protección contra las variantes del SARS-CoV-2. En los EE.UU., los casos de COVID-19 continúan disminuyendo a medida que aumenta la tasa de vacunación, lo que demuestra que las vacunas funcionan contra las variantes.
➡️ Las vacunas pueden ayudar a las personas que han tenido COVID largo o síndrome post COVID con síntomas durante los meses posteriores a la recuperación del contagio como fatiga, mareos, y dificultad para respirar. Entre el 30 y el 40% de estas personas mejoraron después de la vacunación. Si bien esto aún se está investigando, las vacunas pueden ayudar a combatir cualquier virus restante o pueden ayudar a restablecer el sistema inmunológico.
RESULTADO FINAL
💥 Las vacunas proporcionan un refuerzo de la inmunidad incluso en aquellos previamente infectados.
Esto puede ser especialmente importante para la durabilidad de la inmunidad y la protección contra nuevas variantes.
¡Mantente a salvo! ¡Vacúnate!
Cuerpo Sano. Mente Sana.
Las Nerdy Girls
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