Ozempic es un medicamento que se usa para tratar la diabetes y últimamente se ha promocionado como una opción útil para estimular la pérdida de peso.
Ozempic (semaglutida) fue aprobado en 2017 para el tratamiento de la diabetes. En algún momento de 2022, el fabricante del fármaco, Novo Nordisk, anunció que escaseaba el fármaco, en parte debido a la demanda “increíble”. En las redes sociales, las celebridades de todo el mundo promocionaban las capacidades de pérdida de peso de la droga, considerándola casi como una cura “milagrosa” para el sobrepeso y la obesidad.
Ozempic reduce el azúcar en la sangre y la A1C y ayuda al páncreas a producir más insulina cuando el azúcar en la sangre es alto, lo que evita que el hígado produzca y libere demasiada azúcar y ralentiza el proceso de salida de los alimentos del estómago para que se sienta satisfecho por más tiempo. Ozempic tiene mucho potencial para ser un importante mitigador de la morbilidad y la mortalidad a nivel de la población. Por ejemplo, algunos resultados de ensayos clínicos sugieren que Ozempic reduce el riesgo de muerte cardiovascular, infarto de miocardio no fatal y accidente cerebrovascular no fatal hasta en un 26% en pacientes con diabetes tipo 2.
La FDA ha aprobado Ozempic para su uso en la diabetes tipo 2. Las personas que no cumplen con los criterios de uso pueden tener problemas para obtener un seguro que cubra el medicamento, y es bastante costoso, lo que tal vez explique cómo tantas celebridades lo usan para perder peso.
El medicamento se administra a través de inyecciones semanales. El medicamento viene con algunos efectos secundarios, que incluyen náuseas, fatiga, malestar general y cambios en la actividad intestinal, incluido el estreñimiento severo. Los efectos secundarios más graves (pero no tan comunes) incluyen pancreatitis, problemas de la vesícula biliar y problemas renales. Los pacientes que toman este medicamento deben ser supervisados por un médico y la tendencia de las personas a obtener estos medicamentos en línea sin supervisión clínica es preocupante.
Muchos médicos también han señalado que simplemente no hay muchos datos sobre cómo este medicamento afecta a las personas que no cumplen con los requisitos de uso habituales. Los pacientes con un IMC normal, por ejemplo, pueden experimentar efectos secundarios más intensos.
Puede ser tentador recurrir a este supuesto “fármaco milagroso” para bajar de peso, pero como con cualquier medicamento, los beneficios y los riesgos deben sopesarse al tomar decisiones, y es mejor considerarlos en colaboración con un médico. Siempre hable primero con su médico y utilice los canales oficiales para obtener acceso a este y cualquier otro medicamento.
Cuerpo sano. Mente sana.
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