No poder hacer ejercicio es uno de los síntomas de largo plazo más comunes después de tener COVID-19. Muchos científicos continúan investigando las causas de estos síntomas enfocándose en el sistema nervioso autónomo. Aquí daremos información sobre dos aspectos comunes sobre la incapacidad de realizar ejercicio después de tener COVID-19 y también estrategias para sostener su recuperación.
Nerdy Girl Dra. Ashley presente para contar mi experiencia. Después de tener COVID-19, he experimentado cambios rápidos e impredecibles en mi ritmo cardíaco que me hacían sentir mareada y con dificultad para respirar. Los síntomas podrían ser el resultado de lo que se llama “la disfunción autonómica”.
Un número creciente de estudios clínicos están examinando una correlación entre la infección de COVID-19 y la función de reacciones interrumpidas de nervios y caminos en los vasos sanguíneos. El cuerpo automáticamente ajusta el ritmo cardíaco y presión sanguínea para mantener oxígeno en sus órganos, incluso durante el ejercicio cuando la demanda de oxígeno es más alta. Estos cambios son parte de la regulación autonómica. Ocurren autónomamente y automáticamente– sin ninguna duda.
La regulación autonómica puede ser disminuida en algunas personas después de una infección de COVID-19. Un ejemplo de un problema con estos sistemas autonómicos es EL POTS, síndrome de taquicardia ortostática postural, lo cual ocurre después de una infección de COVID-19. Cuando me levanté, mi ritmo cardíaco se disparó y me sentí mareado y tenía dificultad para respirar. La mayoría de mis síntomas se resolvieron después de 14 semanas de progreso lento y constante y mucha paciencia. Las escaleras fueron un desafío en noviembre de 2021. Ahora puedo tolerar 30 minutos de ejercicio moderado unos días a la semana.
La Nerdy Girl, Dra. Sandra Albrecht, experimentaba fatiga intensa después de hacer ejercicio por meses siguiendo una infección de COVID-19. Después de un camino corto sus músculos se habían sentido como si hubiera corrido una maratón y necesitaba descansar. Estos síntomas fueron consistentes con el malestar posesfuerzo (PEM), un demorado llegada de fatiga extrema que dura semanas hasta meses después de una infección de COVID-19. El ejercicio también puede causar el regreso de la niebla mental y dolores corporales. Los mecanismos subyacentes para estos síntomas siguen siendo estudiados y pueden ser relacionados a la disfunción autonómica y condiciones como síndrome de fatiga crónica y encefalomielitis miálgica. Después de unos meses los síntomas de la Dra. Sandra han disminuido pero no se han resuelto completamente.
Mientras más investigaciones se realizan para entender las causas subyacentes para la intolerancia del ejercicio después de COVID-19, aquí encontrará unos consejos para asistir su recuperación.
🐢 Pare, descanse y marca el ritmo. Esto es lo que la gente de la comunidad de síndrome de fatiga crónica/encefalomielitis miálgica recomienda para regresar lentamente al ejercicio. Si un camino corto por una sala al otro es lo que puede tolerar, ¡cuenta como ejercicio! Establece metas pequeñas para el movimiento incrementado al paso que su cuerpo puede tolerar. Escuche lo que su cuerpo dicta y reconozca cuándo necesita descansar. Siestas pequeñas se pueden proveer con energía por el resto del día y ayuda después del ejercicio. ¡Sesiones cortas cuentan! En vez de 30 minutos de ejercicio, intenta una o más sesiones de 5 o 10 minutos de ejercicio a lo largo del día para preservar su energía.
💺 ¡Ejercicios utilizando una silla también cuentan! Estos pueden ser utilizados para el entrenamiento de resistencia y de fuerza sin añadir fluctuaciones normales en la presión sanguínea y ritmo cardíaco causados por estar de pie o esforzándose. Hay muchos videos en el internet de ejercicios sentados de buena calidad.
📝 Guarde un registro de su progreso. Este pueda ayudar a identificar beneficios constantes y despacios o síntomas que empeoran. Considera llevar cuenta de la duración de su ejercicio, el tipo de ejercicio, y cualquier síntoma que aparecen durante o después del ejercicio.
💧¡Mantenerse hidratado! Suficiente volumen líquido en sus vasos sanguíneas pueden ayudar a contrarrestar la desregulación autonómica durante el ejercicio que causa síntomas incómodos.
🏥 Llame a su médico o busque ayuda de uno. Si sus síntomas son graves (dolor en el pecho, dificultad para respirar, el desmayo) o si la situación no está mejorando, debe ser evaluado para excluir otros problemas subyacentes y para determinar un plan de tratamiento apropiado.
Cuerpo sano, mente sana.
Las Nerdy Girls
Enlaces adicionales:
Afecciones posteriores del COVID-19 (los CDC)
Que es el covid prolongada (de QP)
Los ensayos clínicos sobre COVID19 (en inglés)
La encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica (EM/SFC) (los CDC)
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Publicación anterior de QP “¿Que es el Long COVID o COVID Prolongado?
ClinicalTrials.gov
Ensayos clínicos sobre COVID-19 y la intolerancia del ejercicio (en inglés)
