El virus respiratorio sincitial (VRS) es uno de muchos virus que puede causar el resfriado común.
Hay que estar atento a este virus: es muy contagioso y, a diferencia de algunas de las otras causas del resfriado común, el VRS puede volverse peligroso. Los bebés prematuros, los bebés, los niños pequeños, personas con enfermedades inmunológicas, pulmonares o cardíacas, y los adultos mayores están en riesgo. Y los casos de VRS están incrementando rápidamente en el hemisferio norte en este momento.
Mis hijos fueron a un campamento de escalada en roca a inicios de julio. Fue nuestra primera actividad en interiores con otras personas desde marzo de 2020. Era requerido utilizar mascarillas, pero a pesar de ello, se enfermaron con un resfriado que inmediatamente nos contagiaron a mi esposo y a mí.
Afortunadamente en nuestro caso, todos nos mejoramos en solo unos días. Nos enfermamos pero no gravemente, no sé si tuvimos el VRS, porque nadie estaba lo suficientemente enfermo como para justificar un viaje al doctor. Este es el patrón típico de VRS. Evitamos interactuar con los abuelos mientras que estábamos enfermos, especialmente porque uno de los abuelos es parte de un grupo de alto riesgo. Aunque las personas frecuentemente piensan de VRS como un problema de salud de niños, VRS causa más de 150,000 hospitalizaciones y 14,000 muertes en adultos mayores en una temporada típica.
El VRS normalmente es un virus estacional con una curva epidémica que comienza a mediados de septiembre, justo después de que los niños regresan a la escuela. Es probable que la estacionalidad sea impulsada por su modo de transmisión: el VRS se transmite cuando unos dedos mocosos tocan superficies compartidas y al toser y estornudar en el aire interior compartido. De hecho, casi todos los niños tendrán VRS por lo menos una vez, y al menos la mitad de niños lo tendrán dos veces. La infección por VRS no produce una buena memoria inmunológica, así que nos podemos enfermar con él una y otra vez. Cada vez que uno se enferma con esto la inmunidad mejora un poco, así que los niños mayores y adultos sanos experimentan una enfermedad menos grave.
Este año, el hemisferio norte está teniendo un “pico de verano” muy inusual de VRS, probablemente porque los niños de repente comenzaron a reunirse para actividades en persona por primera vez en más de un año. Esto también podría ser una “puesta al día” de la temporada normal de VRS perdida el invierno pasado. El VRS es algo que todos lo tendrán, así que si usted tiene un niño que no lo tuvo el invierno pasado, están atrasados. En junio, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) emitieron un aviso advirtiendo a los médicos sobre un brote de VRS en los estados del sur de los EE.UU.. En este punto, no está sucediendo demasiado en los estados en el oeste de los EE.UU., pero hay un brote importante en curso en el sur, el medio oeste y el noreste de los EE. UU. Tenga en cuenta que no hay muchas pruebas de rutina para VRS, por lo que los datos son un poco irregulares.
El VRS causa muchas enfermedades graves todos los años. Normalmente causa más de 2 millones de visitas al médico en niños menores de 5 años y más de 200,000 hospitalizaciones en los EE.UU. cada año, la mayoría de ellas entre personas mayores. Y en una temporada típica, el VRS mata a 14,000 adultos mayores de alto riesgo.
Los síntomas del VRS aparecen entre 4 y 6 días después de haber estado expuesto y, por lo general, incluyen: secreción nasal, disminución del apetito, tos, estornudos, fiebre y sibilancias. Estos síntomas suelen aparecer en etapas, por lo que es como si cada día fuera una nueva aventura para sentirse mal durante aproximadamente una semana. En los recién nacidos, los únicos síntomas pueden ser irritabilidad y dificultad para respirar. En los niños, suele ser secreción nasal y disminución del apetito, y tos unos días después. En los adultos, muchas veces es indistinguible de cualquier otro resfriado.
La mayoría de las personas mejoran por sí solas, pero en algunas personas puede causar inflamación grave de los pulmones y neumonía (una infección de los pulmones). También puede provocar deshidratación. Estos casos más graves pueden requerir atención hospitalaria.
La prevención del VRS es la misma de siempre: mantener las manos limpias y evitar el contacto cercano con personas enfermas. En este caso, “contacto cercano” significa besarse, darse la mano y compartir tazas y cubiertos.
Si tiene síntomas del “resfriado común”, evite el contacto con personas de alto riesgo, como recién nacidos, bebés prematuros, personas con sistemas inmunitarios comprometidos y personas con enfermedades pulmonares o cardíacas crónicas. Ya será contagioso aproximadamente una semana después de que aparecen los síntomas.
Los científicos han estado trabajando en una vacuna para el VRS durante décadas, hasta ahora sin éxito. Una vacuna candidata en investigación fracasó rotundamente en 1967 después de que se descubrió que empeoraba la posterior infección por VRS en niños pequeños. Dos niños pequeños murieron de VRS grave después de recibir la vacuna y las tasas de hospitalización fueron extremadamente altas. Probablemente sea el fracaso de una vacuna más espectacular de la historia. Este es el primer ejemplo conocido de “empeoramiento de la enfermedad asociada a la vacuna”. Las preocupaciones sobre la repetición de este error siguen siendo una prioridad cada vez que los científicos desarrollan una nueva vacuna, y los candidatos a vacunas se controlan cuidadosamente para detectar si cualquier señal de que el empeoramiento de la enfermedad asociada a la vacuna está en juego.
Este fracaso ha perseguido el desarrollo de una vacuna para el VRS. Durante mucho tiempo, ni siquiera se consideró una opción. Las causas del problema tardaron décadas en desenredarse, y nadie quería correr el riesgo de repetir el mismo error hasta que se entendiera la causa.
Sin embargo, más recientemente, la tremenda carga del VRS y la mejor comprensión del proceso de la enfermedad han despertado un interés renovado. Es complicado diseñar una vacuna, en parte porque queremos proteger a los recién nacidos cuyos pequeños sistemas inmunológicos no generan una respuesta inmunitaria fuerte. Una estrategia que se está considerando es vacunar a las personas durante el embarazo. Sabemos que los anticuerpos del VRS se transmiten al bebé en el útero. (Los anticuerpos también se transmiten al bebé a través de la leche materna).
Otra estrategia es diseñar una vacuna para proteger solo a los adultos mayores (que no tuvieron la enfermedad potenciada por la vacuna en el ensayo fallido de la década de 1960; solo les sucedió a personas que nunca antes habían tenido el VRS).
Pero, hasta ahora, ninguna otra vacuna candidata ha tenido éxito en los ensayos. Existe la esperanza de que lo último en tecnología de vacunas, las mismas tecnologías que nos trajeron las vacunas contra COVID-19, también podrían significar un gran avance para este problema persistente. AstraZeneca y Sanofi anunciaron recientemente un ensayo exitoso de Fase III de un nuevo tratamiento (no en realidad una vacuna, sino un anticuerpo profiláctico de acción prolongada).
Por ahora, solo podemos lavarnos las manos, cubrirnos la boca al toser y cancelar planes con abuelas y recién nacidos cuando nos esté moqueando la nariz.
Cuerpo Sano, Mente Sana,
Las Nerdy Girls
Enlaces adicionales:
¿Qué es el virus respiratorio sincitial?
El VRS en los adultos mayores y los adultos con afecciones crónicas
La historia y características de la enfermedad potenciada de VRS (artículo en inglés)