R: Si bien aún no lo sabemos con certeza, no parece que las vacunas de Pfizer-BioNTech o Moderna causen la parálisis de Bell.
¿Qué es la parálisis de Bell?
Es una condición que causa debilidad en un lado de la cara. El nervio facial (el séptimo nervio craneal para todos ustedes que tienen un seguimiento más amplio) es responsable del movimiento de la frente, el párpado, la mejilla y la boca, así como del sentido del gusto de la lengua. Cuando este nervio se daña o se inflama, una persona puede desarrollar parálisis de Bell. Esa persona puede presentar un movimiento reducido o ausente de un lado de la cara, al igual que dificultad para cerrar el ojo y la disminución del sentido del gusto.
¿Qué tan común es la parálisis de Bell?
Desafortunadamente, es una condición bastante común y ocurre en aproximadamente 15-30 de cada 100,000 personas. En los ensayos clínicos de las vacunas del COVID-19, las tasas de desarrollo de la parálisis de Bell fueron las mismas que las que llamamos la “tasa de fondo” (o la tasa que ocurriría si no hubiera cualquier evento que incitara la parálisis).
Hubo 4 casos de parálisis de Bell en el ensayo clínico de Pfizer-BioNTech de 18,801 personas que recibieron la vacuna y 0 casos de las 18,785 personas que recibieron el placebo. En el ensayo clínico de Moderna, hubo 2 casos de 15,185 personas en el grupo que recibió la vacuna y 1 caso de 15,166 personas en el grupo que recibió el placebo. En conjunto, esto significa que 17.7 de cada 100,000 personas que recibieron la vacuna desarrollan parálisis de Bell (¡igual que la “tasa de fondo” que se especifica arriba!). Esto llevó a la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (
, FDA por su sigla en inglés) y a los profesionales médicos a decir que no hay evidencia actual de ningún vínculo entre la vacuna y la parálisis de Bell, y que esas personas probablemente desarrollaron la parálisis de Bell por coincidencia en el momento de la vacunación.
Si no es la vacuna la que lo causa, ¿qué lo hace?
La mayoría de las veces, los médicos no encuentran una causa clara de la parálisis de Bell. Hay muchas causas potenciales, como el virus del herpes simple, la diabetes, otros virus (como los virus del resfriado y la influenza) y la lesión del nervio mismo.
Aunque no siempre se encuentra una causa específica, la parálisis de Bell usualmente mejora en uno o dos meses. Por lo general es tratada con esteroides y a veces con medicamentos antivirales 
. Y, lo que es más importante, si alguien tuvo parálisis de Bell en el pasado, aún puede recibir la vacuna del COVID-19.
Por supuesto, el monitoreo de la seguridad de las vacunas está en curso y obtendremos más información con el tiempo. Por favor, consulte nuestras publicaciones anteriores sobre información de las vacunas.
Mente sana, cuerpo sano,
Las Nerdy Girls
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Informe de la FDA sobre la vacuna Pfizer-BioNTech (En inglés)
